¿Qué es el marketing? La historia de una magdalena, un muffin y un cupcake.

Marketing: la magdalena, el muffin y el cupcake

Existen mil y una descripciones de la palabra marketing. Existen mil y una frases que resumen ese concepto. Pero yo he encontrado una imagen en las redes que resume perfectamente lo que es el Marketing.

Marketing no es más es una estrategia para «saber vender» un producto. Es publicidad, es packaging, es identidad gráfica, es el todo que envuelve a ese producto… Las estrategias son diversas, y saber encontrar la adecuada es todo un arte.

«La creatividad sin estrategia se llama arte. La creatividad con estrategia se llama publicidad». Jef Richards

Para el super de la esquina, su estrategia de marketing es llenar sus escaparates con con cartulinas con los precios escritos en colores fosforitos y estridentes. Para CocaCola, venderte un modelo de vida. Para Gadis, relacionar su imagen con el sentimiento patriótico de ser gallego.

Explicar que es el marketing es fácil y complejo a la vez, pues parte del concepto es algo hetéreo, algo inmaterial… Aunque lo tenemos tan integrado en nuestra sociedad, que todos lo entendemos.

El principal objetivo del marketing es vender un producto o una marca. Hacerla visible, e incluso provocar en el consumidor que la necesita aunque no sea cierto. Vivimos en un mundo donde el marketing lo es todo. Compramos objetos o consumimos productos que no necesitamos, pero el hecho de haber una buena estrategia de marketing y publicidad, hacen que los queramos…. que los necesitemos!

Pero también es comunicar lo que esa marca o producto quiere que sepamos de ella. O con que lo relacionemos. Si queremos vender algo para jóvenes, nuestra estrategia debe estar enfocada a ese perfil.

Pero sin duda, esta imagen que encontré hace tiempo en internet, es una de las mejores descripciones de marketing que he visto. Desconozco el origen de la foto (si la encuentro, lo pondré aquí), pero en su momento, se extendió como la pólvora por redes sociales. A pesar de tener sus añitos, no ha perdido su esencia ni intencionalidad.